Una caja de “sorpresas” llamada Real Zaragoza

Resulta inquietante acudir a los medios digitales cada cierto tiempo para comprobar si se han producido noticias del Real Zaragoza. Los cauces normales ya no sirven puesto que lo deportivo es lo que menos información genera. Los llamados casos Esnáider”, “Braulio” y “Matuzalem” han puesto en boca de la prensa nacional al equipo que preside Agapito Iglesias, también en la palestra por los fondos de inversión que trajeron a Juan Carlos y Roberto y por la primera goleada del Real Madrid esta temporada, la segunda más humillante de toda la historia del club aragonés en la Romareda.

Javier AguirreEstá claro que la situación actual del equipo blanquillo provoca una honda preocupación en la masa social, absolutamente al margen de las maniobras del presidente. De hecho, recurrió en su momento a que la Asociación de Pequeños Accionistas del Real Zaragoza estuviera presente en el proceso concursal y eso que este colectivo agrupa a más de catorce mil asociados aunque su peso accionarial sea muy escaso.

Que Aguirre se vaya haciendo con el equipo es una buena noticia y algo esperado, ya que se han producido quince bajas y trece altas en los últimos meses y así es imposible organizar un sistema válido de juego cuando, además, ha llegado un tal Antonio Tomás fuera del mercado de verano al encontrarse sin equipo. Pero esa normalidad es muy subjetiva ya que solamente ha conseguido seis puntos se seis partidos y se encuentra a dos por encima del descenso. Es decir que, en cualquier momento, en el caso de dos tropiezos consecutivos, volveríamos otra vez al pozo.

Los tiempos cambian y ahora nos toca vivir el presente más inmediato porque el futuro es tan incierto como desconocido.

Que Aguirre se vaya haciendo
con el equipo es una buena noticia

El caso es que la FIFA ha solicitado a la Federación Española de Fútbol que le reste seis puntos en la clasificación y que, si insiste en no pagar, le descienda de categoría. Algo que no está permitido con la legislación vigente en España al estar inmerso en un proceso concursal pero que cambiará la próxima temporada. El prestigio del club aragonés está por los suelos, nadie se fía del Real Zaragoza y la propia FIFA investiga los fondos de Mendes, muy activo con Agapito y sus negocios futbolísticos.

Los aguas bajan revueltas en el cauce balompédico zaragocista pero la pausa de este fin de semana por los compromisos internacionales de la selección española, nos darán algo más de aire para afrontar la competición. Y más tiempo a los jugadores para fortalecer la plantilla y ser más competitivos.

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