Dentro de las jornadas culturales recibimos la visita en el centro de la asociación marroquí Al-Boughaz que nos brindó una conferencia a cargo de Mohamed Tamer sobre el Acercamiento y Puntos de Encuentro de las Culturas Musulmana y Cristiana. Al terminar la conferencia los internos que habían asistido pudieron dar sus puntos de vista, respetando el de los demás, sobre todo lo mencionado a lo largo de la tarde. Muchas preguntas se quedaron en el tintero, pero la redacción DIGO! tuvo la oportunidad de entrevistarlo y hacerle algunas preguntas más y éstas fueron sus respuestas.

Hola Mohamed. Como musulmán que eres ¿Crees que estigmatiza la cultura árabe?

Yo creo que el problema que hay con la cultura árabe es que ahora hay una satanización del pueblo árabe e influye mucho la política sobre la cultura. Ya sabéis como está el mundo ahora con las guerras, con Afganistán, en Irak, en otros sitios, entonces se le mira al mundo árabe como si fuera el eje del mal, que viene por parte de estos países árabes y las relaciones que han tenido con el mundo occidental. Por eso digo que la política ha hecho mucho daño a la cultura y al acercamiento entre lo que es el mundo cristiano y el mundo musulmán.

¿Es la cultura árabe demasiado radical con la evolución?

Es mentira. La cultura árabe no es radical y por dar un ejemplo volvemos al pasado cuando España era lo que es ahora USA, una referencia en el mundo, una potencia en ciencias, en medicina, en cultura y en todo debido a la cultura árabe. El problema que hay ahora es que después de la colonización que ha habido por parte de occidente al mundo árabe, porque sólo hace 40 años atrás seguía existiendo la colonización, las consecuencias se siguen dando ahora. Sabemos que el mundo árabe no es democrático al estilo del mundo occidental. Tenemos reyes, y lo que pasa con la monarquía es que reinan y gobiernan. Y los países que no son reinos, como Túnez, Egipto, Libia… son presidencias pero es como una especie de reino también y eso hace que el gobierno no deje que el pueblo decida. ¿Y por qué? Pues porque a occidente le interesa que estos gobernantes velen por sus intereses.

Uno tiene que adaptarse e
intentar comprender, respetar y convivir

¿Por qué no existe una apertura de la cultura musulmana con las demás?

Yo creo que la apertura existe. Creo que depende de las personas y de cómo tienen enfocada la cultura. Por ejemplo, yo llevo 20 años en España y no he tenido nunca un problema de adaptación. Estoy casado, tengo familia, amigos y aunque sea un ejemplo personal es lo que le pasa a la mayoría de musulmanes que llegan aquí. Luego también hay otros casos en los que la marginación hace que se encierren. El problema del idioma, de no poder expresarse bien, hace que tengan miedo y se encierren, no encuentra un buen trabajo y está marginado… por eso digo que la marginación y el problema del idioma hace que el musulmán a veces se pueda encerrar.

¿Considera que una persona que emigra a otro país debe adaptarse a las costumbres del país de acogida o por el contrario debe de chocar?

Yo creo que no hay ni que chocar ni perder por completo tu identidad. Uno tiene que adaptarse e intentar comprender, respetar y convivir con los demás. La regla básica es la convivencia, y luego el respeto. Si yo respeto puedo convivir perfectamente. Intentar que el mensaje que queramos transmitir sea un mensaje abierto, que haya comunicación, porque sino vamos a tener problemas porque no nos van a escuchar.

El respeto se basa en los derechos de unos y otros. ¿Hasta dónde cree que llegan los derechos de cada uno?

Cuando ya empiezan a tocar los derechos de la otra persona. Siempre hay un límite; y si yo me paso de esos límites y empiezo a afectar a tus derechos, entonces ya no hay respeto e invado el territorio de los demás.

¿Crees que la religión ha sido causa de la división entre los seres humanos?

Yo considero que la división no ha sido causada por la religión, sino por las ideologías y el ser humano, que ha manipulado las religiones. Manipulan los gobernantes, la política manipula. Por ejemplo, las guerras que hay en el mundo son las cosas que fomentan el terrorismo. Un ejemplo es Irak. En Irak nunca hubo terrorismo.

A veces intento entender
al ser humano, pero se me hace muy difícil

Cuando estuvo Hussein gobernando no había terrorismo allí; ni Al-Qaeda ni nada referente a terrorismo. Ahora tenemos gente terrorista que actúa en nombre de Alá, que comete atentados, que se inmolan… y el caldo de cultivo de todo esto ha sido la política, la injusticia y la guerra de los fuertes que se han impuesto engañando a todo el mundo: que si armas de destrucción masiva, que si terrorismo e infinidad de cosas más. Y luego ya nos han metido allí. Yo creo que el mundo, bueno, que los gobernantes son los que en parte tienen la culpa. Nosotros somos sólo ciudadanos y alguien desde arriba, no sé quién, mueve los hilos.

No sé, a veces intento entender al ser humano, pero se me hace muy difícil. ¿Por qué nos queremos hacer daño los unos a los otros? ¿Por qué las guerras? “La guerra es muy importante porque así se mueven muchas empresas, la logística, el petróleo, entonces también se genera trabajo y dinero” según algunos claro está. Y mira como está el mundo ahora, con guerras. Pero ¿dónde está el beneficio? Nadie se beneficia al fin y al cabo.

Los muertos, las injusticias, el planeta se fastidia por la contaminación, por las bombas que hay, y sobre todo por el odio que aún sigue allí. Que llegando a estas alturas del siglo XXI,  todavía sigamos pensando mal los unos de los otros es lamentable, porque cuando miras al ser humano te das cuenta de que todos somos iguales.

Desde la redacción DIGO! agradecemos la participación de la asociación Al-Bougaz con el centro y su aporte al conocimiento de la cultura musulmana.