No prostituyas tus sueños

Escrito por: Redacción Digo

Se dice que solamente el 1% de la población mundial tiene escritos sus sueños, pero que el 90% de ellos los consiguen. Aunque sean datos orientativos, considerarlos es relevante.

SueñosYo creo que no perdemos nada por intentarlo, ¿no crees? Qué cuesta coger una hoja de papel y un boli, y anotar cuáles son tus objetivos o sueños en cualquiera de los plazos que nosotros mismos nos marquemos para llegar a ellos. Sin olvidar tener en cuenta cuáles son las herramientas necesarias que emplearemos, así como el camino que vamos a seguir.

Es importante además, piel, y de color blanco. Después de todo el tiempo invertido en comprarlo, el trabajo para reunir el dinero, y además de todas las ilusiones volcadas en él… ¿permitirías que alguien le derramara un refresco o un café por encima? o ¿que apoyaran los zapatos sobre él?

Seguro que ante este ejemplo la respuesta es una clara negativa, NO! Pero… debería ser una respuesta siempre así de simple, ante cualquier sueño y objetivo que nos propusiéramos conseguir. Sea algo material; como un modelo de coche, o una casa… o cómo sentirnos dentro de 6 meses, o planificar nuestra familia… Cualquier “cosa” a que apuntemos, hay que evaluar si estamos yendo por el mejor camino, o por lo contrario se debe modificar algún comportamiento o actitud para seguir por el más adecuado.

Una vez elegidos nuestros sueños
que nada ni nadie los modifique

Una vez elegidos nuestros sueños, lo realmente importante es no permitir que nada ni nadie los modifique. Hay que saber y ser más que consciente de que aparecerán obstáculos y dificultades. Y también que vendrán personas más o menos cercanas a intentar poner trabas para su consecución. Pero debemos ser firmes.

Me gusta poner a modo de ejemplo, cuando hablo de este tema, esta situación: Imagina que tu sueño es un sofá en forma de L, en ese papel, debemos defenderlo ante cualquier acontecimiento ¿o traspiés? que aparezca o surja. No te esfuerces en arrastrar lastres innecesarios, no des rodeos para evitar lo inevitable, sé valiente y constante. Tus sueños son la meta que tú mismo te has marcado.

No tiendas a justificarte a tí mismo los errores que cometas. Somos humanos, no perfectos. De hecho, somos únicos e irrepetibles, así que sé sincero contigo y con los demás. Todo esto te será de gran ayuda para avanzar por el camino hacia tus sueños.

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