Rarezas

Escrito por: Fernando Esquiroz

Llevaban varios días comiendo juntos en completo silencio. Los dos sabían que se observaban mutuamente al cruzarse en el patio o en la galería pero jamás habían intercambiado una palabra. Junto a la pared se sentaba el más grande. Su más de metro noventa le destacaba sobre el resto. Piel morena, barba descuidada, una gran cicatriz cruzaba su mejilla y una larga melena morena rizada la disimulaba. Se santiguó, cató su comida y preguntó:

- ¿Tu aquí qué haces?

Su acento remarcó aquella dura imagen. A su lado parecía diminuto su compañero de mesa. No llegaba al metro ochenta. Llevaba un chándal morado, unas botas de monte y una camiseta con el logo de un partido político ilegalizado. Le decían “el vasko”. Sin apartar los ojos de su bandeja con la comida le contestó:

- Yo aquí leo y escribo.En la cárcel

El tono mostraba claramente desgana.

- ¡Olé, qué rarezas!

Exclamó aquel tipo con un trozo de pan en la boca. Seguidamente tragó, bebió agua y replicó con tono desafiante.

- ¡Yo mato!

Una carcajada incontenible salió de la boca de aquel chico flaco. El gitano frunció el ceño. Parecía ofendido. El Vasko le miró a los ojos fijamente y de manera impasible dijo:

- ¿Rarezas? Si tú matas…entonces antes de comer a quien rezas.

No volvieron a hablar en toda la comida.

 * 1º Premio categoría Microrrelato en el Certamen ”Picapedreros” de Poesía, Guión y Microrrelato 2012 para centros penitenciarios

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