Tu rostro de pirata
surcando mi vientre,
eso soñé.

Yo, mujer Caribe
hoy finjo ser roca
por despistar ojos extraños,
que no se note que tiemblo
que el coral de tu verbo
me ha herido,
con una herida bella,
que brilla
que tiñe y baila.

Sangre que reinventa
ciudades y ríos,
esta herida te canta
a mi pesar,

hendidura que noto
como si se prolongara mi vagina
abriéndose paso hacia el ombligo.

Todo roce es placer
dolor y vilo,
líquido hilo,
hilo de sangre sobre el cual
me vuelvo funámbula
para recorrerlo
y mancharme los pies,
las manos,

luego querré
untarte de este almíbar
y que si alguien te palpa
en el futuro
perciba que antes hubo
una mujer circense
capaz de andar
tu rostro de pirata
tu sexo
tus sentidos.

* Finalista categoría Poesía en el Certamen (Externo) ”Picapedreros” de Poesía, Guión y Microrrelato 2013.