Solomillo de cerdo relleno con champiñones y queso con salsa de setas del bosque y bacon

Enviado por: Sebastián I.

INGREDIENTES

(PARA 6 PERSONAS)

  • Tres solomillos de cerdo blanco de unos 500- 600 gr, cada uno.
  • Una cuña de queso semicurado   (mescla).
  • Medio kilo de champiñones frescos.
  • Tres cebollas medianas, dos dientes de ajos.
  • Una latita de pimientos del piquillo.
  • Sal, pimienta negra molida,  ajo granulado.
  • Una nuez de mantequilla y un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
  • Papel de aluminio, una tasita de vino blanco (100 ml).

PARA LA SALSA:

  •   Dos o tres cebollas medianas.
  •   Medio kilo de setas del bosque congeladas.
  •  0,50 gr de bacón.
  •   Medio litro de leche de vaca.
  • Medio litro de nata para cocinar.
  • Sal, pimienta blanca molida.
  • Una nuez de mantequilla y un chorrito de aceite de oliva virgen extra.

solomillo-de-cerdo-relleno

MODO DE EMPLEO:
EL RELLENO

Limpiar  los solomillos de la grasa sobrante, quitar el cordoncito de carne que está pegado al largo del solomillo, si es que la tiene, corta las puntas unos 2-3 como para facilitar el corte  al abrirlos. Abrirlos suavemente con un cuchillo bien afilado, empezando por la parte de arriba un poco, luego dándole la vuelta con el corte hacia abajo aguantando la carne con la palma de la mano recta sin que el cuchillo llegue a cortarnos los dedos, poquito a poco con movimientos suaves  a lo largo del solomillo sin desviarnos hacia arriba o abajo, manteniendo el cuchillo lo más recto posible para obtener un corte limpio y plano sin atravesar la cerne para no  hacerle agujeros, obteniendo  así una plancha de carne recta y plana.

Cuando estén salpimentando, espolvorear un poco con el ajo granulado. Dejar que cojan sabor de los condimentos en, la nevera  enrollándolos  suavemente. Mientras tanto, preparar la salsa y el relleno.

Pelar, limpiar y cortar las cebollas en julianas y los ajos en láminas. Lo mismo con los champiñones frescos. Poner  a  escurrir las setas  previamente descongeladas  con un día  de  antelación.

En una cacerola poner las cebollas, la mitad más o menos, junto con el ajo, la nuez de mantequilla y un chorrito de aceite de oliva. Rehogar hasta que cambie de color (caramelizando un poco) y luego añadir los champiñones y dejar cocinar al fuego medio hasta ablandarse. Verter el vasito un vino blanco y dejar evaporar el alcohol.

Cuando esté, verter en un escurridor, dejar enfriar y escurrir para conseguir un relleno más compacto.

LA SALSA

En una olla más chica, de unos dos litros más o menos, rehogamos la cebolla sobrante. Dejar reducir y cambie de color dorando sin quemar, añadir el bacon picaita y dejar rehogar bien para soltar el sabor. Añadimos las setas escurridos y a unos 5 minutos después la nata y la leche, la sal y la pimienta blanca. Dejar que cocine unos 10 minutos para que los sabores se mezclen bien y así reducir la salsa un poco. Triturar con la batidora en la misma olla cuando esté y luego pasar por el chino en otro, poner de nuevo a hervir y cuando empiece, espesar la salsa con un poco de maicena si es que es necesario. Su consistencia debe ser como una crema brillante, no como un puré de verduras.

Mientras la salsa está reposando, empezar a rellenar los solomillos con nuestra composición ya templada. Echamos unas bolitas de queso semi-curado cortados previamente en unos 0,5 cm. de anchas y unas tiritas de pimiento de piquillo. Doblamos un poco los lados para que no nos sobresalga el contenido y empezamos a enrollar hacia delante apretando al mismo tiempo suavemente para obtener unos rollos compactos, como un cilindro, como un tubo de unos 5-6 cm. de diámetro, más o menos. Para que no se deshaga los envolvemos en papel de aluminio cortado más largo que los solomillos con unos 4 dedos, previamente untados con aceite para que no se nos pegue a la hora de asarlos. Los cerramos a los lados envolviendo el papel de aluminio como si fuera envolventes de los caramelos, apretándolo un poco sin romper. Los ponemos a la plancha caliente y dejar asar unos 15 minutos dándoles la vuelta para obtener un asado uniforme.

Una vez hecho esto, los retiramos en una bandeja de horno, o de plástico, con unas pinzas y dejamos enfriar un poco para poder quitar el papel del plato.

El jugo soltado, les recomiendo que lo echéis en la salsa, lo mismo que el queso semi-curado. Lo que sobra se raya por el rayador grande, y para dentro cortamos en rodajas, o en trozos de unos 3 cm., cubrimos un poco con la salsa, y si lo deseáis, con un poquito de patatas fritas de guarnición, mejor todavía.

¡Que aproveche!

* 1º Premio en el Certamen ”Picapedreros” de Recetas de cocina 2016  para centros penitenciarios

Imprimir artículo Imprimir artículo Etiquetado como:

Comparte este artículo

Deja un comentario

Por favor ten presente que: los comentarios son revisados previamente a su publicación, y esta tarea puede llevar algo de retraso. No hay necesidad de que envíes tu comentario de nuevo.