Hace algún tiempo, nos visitó el “Hombre del Tiempo” y climatólogo EDUARDO LOLUMO de Aragón TV para acercarnos un poco más la ciencia de la naturaleza más pura – La Climatología y Meteorología Popular.

A su llegada al centro penitenciario de Daroca, rápidamente nos cautivó Eduardo Lolumo con su proximidad y sencillez, tan natural como la vida misma y sobretodo tan predispuesto como siempre, dado que ha participado en todo tipo de conferencias y jornadas de meteorología y climatología desde sus inicios en este “mundo”. Sorprendentemente alguno ya habíamos coincidido con anterioridad en unas formidables jornadas de Meteorología y Climatología.

Podemos afirmar que ésta fue una gran visita y de igual modo una gran conferencia en la que se trató el tema de los refranes populares que vienen a describir situaciones climáticas o meteoros en base a la observación de la naturaleza durante varias décadas.

Los refranes populares que describen “el tiempo” que ha de venir son, sin lugar a dudas, una forma de prepararse para, por ejemplo, salir a la calle, la agricultura e incluso aprovisionarse ante un posible crudo invierno o una larga sequía estival. Como bien nos explicó Eduardo Lolumo; sí tales refranes han perdurado durante los años y décadas…, por algo será, porque de lo contrario hubieran desaparecido con el transcurso del tiempo, tal y como ha ocurrido con otras fórmulas populares para “predecir el tiempo” ante la ausencia de medios materiales de hace siglos e incluso décadas hasta la aparición de la revolución tecnológica propiciada, sobretodo, por los enfrentamientos bélicos.

Durante la mañana de su visita al centro, Eduardo Lolumo nos concedió una entrevista que fue realmente muy agradable, gracias a su proximidad y su buen hacer. Nos transmitió esa afición a la meteorología que fácilmente puede observarse en el espacio de “el tiempo” de Aragón TV y consecuentemente en el día a día de quien tenga la gran suerte de estar junto a él en el trabajo y  vida cotidiana.

Nos expresó su gran profesionalidad e implicación en su trabajo, gracias a su afición desde su infancia a la observación de las tormentas y los fenómenos más adversos de la atmósfera. Y es que tal afición le ha llevado a buscar tornados en los EE.UU o ir, simplemente, a ver una gran nevada in situ al lugar oportuno, como por ejemplo, trasladarse a Torrero porque ahí nevará seguro o cuando hay tormenta irse a Juslibol para encontrarse con las mejores formaciones de cumulonimbos.

Podemos afirmar que el mundo se le está quedando pequeño, algo que comprendemos con facilidad porque muchos de nosotros estamos privados de libertad pero no por ello dejamos de soñar con volar lejos de este lugar, incluso, si fuera posible, trasladarnos hasta los confines del universo.

Finalmente, solo se nos ocurre concluir esta crónica con uno de esos refranes populares que Eduardo Lolumo nos obsequió en su grata visita, y es que ojalá muy pronto podamos volver a disfrutar con su gran sabiduría y conocimiento, porque él es un ejemplo para muchos de nosotros y un hombre digno de conocer.

“Nunca hace mal tiempo si hace el tiempo que corresponde a su tiempo”

“Frío en invierno y calor en verano es lo sano”