La localización de las empresas como variable competitiva
La localización de las empresas o de cualquiera de sus instalaciones (talleres, oficinas, almacenes…) es una decisión de gran trascendencia por la influencia que tiene en su éxito a la hora de competir en los mercados.
De la localización dependen los costes de funcionamiento de las empresas (han de pagar los salarios vigentes en el lugar donde se realiza la actividad, soportan los costes de adquirir y transportar los materiales hasta las instalaciones donde se lleva a cabo su transformación, han de alquilar o comprar los terrenos y edificios…) y también otras variables más difíciles de cuantificar como puede ser el servicio a los clientes (la cercanía a los mercados es un atributo valorado positivamente no sólo por el ahorro en costes de transporte que supone, sino también por la mejor atención que se puede proporcionar). Por lo tanto, tanto si la estrategia de la empresa es la de liderazgo en costes como si es la de diferenciación, la localización es una decisión esencial que debe contribuir al logro de dicha estrategia.
De la localización dependen los costes
de funcionamiento de las empresas
De forma general, las empresas cuyas materias primas son voluminosas y difíciles o caras de transportar, tienden a situarse cerca de los suministradores de recursos, mientras que las empresas de servicios, en las que la cercanía a los consumidores es primordial, suelen situarse cerca de los mercados. También hay que tener en cuenta que a la hora de elegir una localización, la evaluación de los costes de transporte que se van a soportar es una cuestión a tener en cuenta.
Asimismo, tradicionalmente, las empresas que se han planteado localizaciones en diferentes países han elegido de acuerdo con el coste de la mano de obra, pero esto les ha llevado en ocasiones a soluciones poco acertadas porque la variable que se debería haber considerado es el coste de la mano de obra en cada unidad de producto, que depende tanto de los niveles salariales como de la productividad.
No obstante, con el fin de tener en cuenta todos los aspectos a la hora de elegir una localización, existen propuestas teóricas consistentes en seguir el siguiente proceso en etapas:
· En primer lugar, de acuerdo con las características de la empresa, su estrategia y el tipo de producto que elabora, se han de establecer qué variables o atributos es conveniente que tenga el lugar que eventualmente se elija para instalarse. En este paso también hay que determinar si existe alguna característica que necesariamente haya de darse en la localización finalmente seleccionada.
· A continuación se ha de elaborar una lista con todas las alternativas de localización que se planteen.
· Por último, se han de evaluar esas alternativas de acuerdo con las variables relevantes establecidas en el primer paso y elegir la más apropiada. Existen métodos numéricos que facilitan esta evaluación.
Tradicionalmente, las empresas han elegido
de acuerdo con el coste de la mano de obra
La recomendación de seguir este proceso es válida no solamente para empresas grandes. Los pequeños negocios también deberían tomar sus decisiones de localización tomando como base esta propuesta. Es cierto que en este último caso la variable de decisión que predomina es el lugar de residencia del propietario. Pero esto no impide que se haga un estudio en etapas para decidir, por ejemplo, en qué barrio dentro de la localidad donde vive el propietario debería instalarse la empresa o una parte de ella.
También se puede pensar que no todas las instalaciones de una organización tienen que estar en el mismo lugar, por lo que el procedimiento expuesto podría servir para decidir dónde situar los almacenes, las tiendas… si se considera que deben estar separados aun dentro de la misma ciudad. Y, por supuesto, hay ocasiones en que el decisor puede plantearse buscar una localización en el área cercana a su lugar de residencia que no coincida exactamente con su localidad, pero que le permita el aprovechamiento de ventajas competitivas sin necesidad de cambiar de domicilio; en este caso el procedimiento de toma de decisiones de localización podría ser de utilidad.