Un viaje en el recuerdo (Guión)
SEC 1 INT/DIA HABITACIÓN DE MANUELA
Unas manos temblorosas y llenas de arrugas tratan de hacer la cama, estira las sábanas, cubre la cama con la colcha de punto y golpea los almohadones para que queden bien mullidos. Se dirige al baño donde se cepilla el cabello cubierto de canas. Se espolvorea las mejillas y se pinta los labios con carmín rojo.
(Llaman a la puerta con dos toques)
JOVEN
¿Se puede?
MANUELA
Si hijo, pasa…
Entra un joven con una gran sonrisa, deja la puerta de la habitación entornada. La anciana sale del baño y va a su encuentro.
JOVEN
(Con entusiasmo)
¡Buenos días! ¿Cómo se encuentra lo más bonito de mi casa!
(Se acerca a ella y le da un abrazo)
MANUELA
(Abrazándolo)
¡Ay hijo! El lumbago me está matando…
JOVEN
(Le da un beso en la mejilla)
¡Feliz cumpleaños!
MANUELA
(Le aparta cariñosamente y le mira extrañada)
¿Hoy es mi cumpleaños?
(Sonríe muy picarona)
¿Y qué me vas a regalar?
JOVEN
(La coge de las manos, la mira con complicidad)
Le voy a llevar de viaje…
MANUELA
(Entusiasmada)
¿A dónde?
JOVEN
¿Dónde tiene muchas ganas de ir desde hace mucho tiempo?
MANUELA
(Sorprendida)
¡A Roma!
JOVEN
Pues a Roma nos vamos…
MANUELA
(Quejándose)
¡Y yo con estos pelos!
JOVEN
(Sonríe)
¡Anda, anda! ¡Con lo guapa que está con sus labios rojos! Coja el bolso que nos vamos ya…
El se dirige a la puerta, pasa delante del espejo del armario y se mira, ve que tiene la marca roja de un beso en la mejilla, sonríe y se la quita como puede. Manuela coge su bolso y un abrigo de pieles que huele a alcanfor…
JOVEN
(Regañándola desde el pasillo)
¿Dónde va con el abrigo? ¡Que hace mucho calor mujer!
MANUELA
(Muy segura de si misma)
Hasta el cuarenta de mayo no te quites el sayo… que luego me coge frío el cuerpo y ya sabes lo mala que me pongo…
JOVEN
(Suelta una carcajada)
SEC 2 EXT/DIA CALLE PRINCIPAL
Los dos salen a la calle, ella con su abrigo de pieles puesto y su bolso debajo del brazo, está muy contenta porque se va de viaje. El mira su reloj y echa un vistazo a la calle, esperando el taxi que los va a recoger. Al llegar el taxi, el le abre la puerta y ayuda a entrar a Manuela que se mete como puede con el abrigo y el bolso, el taxi es estrecho pero se recoloca como puede. El entra por la otra puerta y el taxista les mira por el espejo retrovisor.
TAXISTA
¿Dónde vamos?
JOVEN
Al aeropuerto.
El taxi echa a andar.
JOVEN
(A Manuela)
¿Está cómoda?
MANUELA
Si, si… Seguro que he hecho bien con traerme el abrigo, porque en Roma refresca.
JOVEN
(Sonríe)
Ahora que caigo… ¿Se ha montado alguna vez en avión?
MANUELA
Ay hijo… yo no… ¿pero es que hay que ir en avión?
JOVEN
(Aguantando la risa)
Hombre… hay que coger un avión, si no vamos a tardar mucho en llegar y no podemos perder todo el día.
MANUELA
(Preocupada)
Pues yo no he cogido las pastillas para el mareo… y me estoy acordando yo que cuando fuimos a Benidorm lo pasé fatal por el camino…
JOVEN
(Se saca un pañuelo largo del bolsillo)
No se preocupe… yo vengo preparado, cuando me mareo me tapo los ojos con este pañuelo, así que se lo voy a poner y asunto arreglado.
(Le venda los ojos a Manuela)
MANUELA
(Contenta)
Qué apañado que eres hijo mío, ¡ea! Pues avísame cuando lleguemos que lo mismo doy una cabezadita…
El Joven sonrie. El taxi sólo ha dado una vuelta a la manzana, para en el mismo lugar dónde los recogió, el joven sale del coche, da la vuelta y saca a Manuela, que sigue con los ojos vendados, del taxi.
JOVEN
¡Vamos al avión!
MANUELA
¡Con cuidado hijo, que se me ha dormido la pierna!
Los dos salen del taxi, pero el joven vuelve a meterla por la otra puerta, le pone el cinturón de seguridad, y entra el por el otro lado. El taxista arranca de nuevo, se dirige a una explanada y empieza a conducir en forma de “s”.
MANUELA
(Agarrándose a lo primero que pilla)
¿Va muy rápido el avión no?
JOVEN
Si, es normal, pero ya estamos llegando…
El taxista vuelve al lugar donde los recogió y los deja en la acera de enfrente. El joven sale y saca a Manuela como puede y a trompicones del taxi. El taxista se pone una boina y un bigote falso.
JOVEN
Ya hemos llegado…
MANUELA
(Se quita la venda de los ojos)
¿Ya?… igualito que en mis tiempos… que te montabas en la burra y echabas el día en ir al pueblo de al lado…
JOVEN
(Sonríe)
Son otros tiempos…
Manuela echa un vistazo general al barrio, el taxista arranca el coche, saca la mano y se despide con un “!Ciao!”. El joven la coge del brazo y se disponen a dar un paseo por las calles que cree que son de Roma.
Manuela se coge del brazo del muchacho, caminan por una calle empedrada. De algunos balcones cuelgan lánguidas unas banderas de Italia. Un hombre pasa delante suya con un niño pequeño de la mano. Ambos los saludan con el puño hacía arriba de forma exagerada.
NIÑO
¡Hasta luegui!
Manuela y el joven continúan caminando, mientras ella sonriente busca curiosa con la mirada todos los detalles del paisaje. El muchacho se suelta del brazo de Manuela y se adelanta un par de pasos. Se gira hacía ella.
JOVEN
Un momento espérame aquí.
El joven se adelanta hasta doblar la esquina y desaparecer de la calle.
MANUELA
Pero, ¿donde vas?
El joven vuelve. Le hace un gesto con la mano para que vaya a él. Manuela se acerca a él, este le coge la mano, y caminan para doblar la esquina.
JOVEN
Venga que le tengo una sorpresa.
MANUELA
¡Ay hijo! ¿Más sorpresas?, mira que una tiene una edad ya y no está para muchas emociones.
JOVEN
Anda Manuela, si está usted perfecta. Además esto le va a gustar.
El joven y Manuela doblan la esquina, una moto Vespa reluce aparcada en la acera. Manuela se queda buscando con la mirada en la calle. El muchacho se acerca hasta la Vespa, y da unos golpecitos en el asiento.
JOVEN
¿Que te parece?
MANUELA
(sorprendida)
Pero…
JOVEN
Como en vacaciones en roma.
MANUELA
… ¿Con mi edad como voy a montarme en una moto?
JOVEN
Para eso no hay edad Manuela, además Roma hay que verla así.
El joven se monta en la moto, mirándola a ella. Le indica con la cabeza que se suba.
MANUELA
¡Ay no, no! Que si me monto así me despeino con todo el viento y no puedo ir luego por Roma con esos pelos. Espérate que voy a ver si encuentro en alguna tienda un pañuelo para cubrirme el pelo.
El joven se baja de la Vespa.
JOVEN
No hace falta Manuela. Si vamos a ir muy lentos.
Manuela busca en la calle una tienda.
MANUELA
No, las cosas hay que hacerlas bien.
Manuela cruza la calle hasta una tienda. El joven entra con ella en la tienda.
SEC 3 INT/DIA TIENDA
El dependiente de la tienda termina de colocar unos productos en bolsas, que les da a unas clientas.
DEPENDIENTE
Hasta luego, Doña Carmen…
Manuela y el joven entran en la tienda. El dependiente se sobresalta al ver a Manuela y empieza a sobreactuar para despedir a las clientas.
DEPENDIENTE
¡Ciao!
Las clientas extrañadas se cruzan con Manuela y el joven en la puerta. Estos avanzan hasta el mostrador. Manuela decidida se acerca hasta el mostrador.
MANUELA
(Vocalizando en un tono alto)
Perdone quisiera un pañuelo.
El dependiente mira al joven extrañado, este asiente con la cabeza.
DEPENDIENTE
(gesticulando con las manos)
¿Pañuelini? Claro, claro… un pañuelini, un belo pañuelini, para la bela muher. Un minuti, pronto vuelvo.
El dependiente se marcha a la trastienda. Manuela se gira al joven.
MANUELA
(sonriente)
Que hombre más efusivo.
El dependiente vuelve al mostrador. Deja un par de pañuelos sobre el mostrador.
DEPENDIENTE
Mire, que peñuelinis, belo, belo…
Manuela coge uno de los pañuelos.
MANUELA
Este quiero.
El dependiente coge el pañuelo y lo mete en una bolsa.
DEPENDIENTE
Molto bene, molto bene… buena elechioni.
El joven se acerca al mostrador.
JOVEN
Deje Manuela, que se lo voy a regalar yo.
El joven saca unas monedas de su cartera, las deja en la mesa. El dependiente las recoge de la mesa.
DEPENDIENTE
Grachie, grachie…
Manuela termina de colocarse el pañuelo en la cabeza. Se dirige a la puerta. El joven y el dependiente se lanzan una mirada de complicidad. El joven se dirige a la puerta con Manuela.
MANUELA
Adios
DEPENDIENTE
Ciao bela.
SEC 4 EXT/DIA CALLE
El joven y Manuela dan una vuelta por la calles, subidos en la moto. Manuela disfruta del paisaje durante el viaje, la gente al verlos pasar los saluda haciendo un gesto típico italiano de dedos hacia arriba. Un rebaño de ovejas se cruza en su camino.
MANUELA
Umm cuantas orejitas para hacer yogur griego
JOVEN
Manuela, estamos en Italia no en Grecia, otro día si que podemos ir allí.
Continúan el viaje en la moto hasta llegar a una calle. Se bajan en de la moto.
JOVEN
¿Quiere que comamos algo?
Manuela se ajusta el pañuelo al cuello.
MANUELA
Sí, pero a un italiano tenemos que ir.
JOVEN
(sonriendo)
Claro. Por aquí he leído, que había uno cerca.
Caminan por un par de calles. Llegan a la fachada de un restaurante, donde cuelga una tabla de madera blanca con el nombre de Luigi escrito de forma rudimentaria en negro. Una pareja sale del restaurante hablando y se cruza con Manuela y el joven.
CHICO
No ha sido muy caro la verdad.
CHICA
No.
Manuela escucha a la pareja que desaparece por la calle. Mira al joven.
MANUELA
Parece que hay más españoles aquí.
El muchacho le sonríe. Ambos entran
SEC 5 INT/DIA RESTAURANTE LUIGI
Un restaurante lleno de mesas vestidas con manteles de cuadros rojos y blancos. Y una rosa en medio. Manuela y el joven entran en el restaurante un hombre vestido con un mantel blanco y un sombrero de chef sale a su paso.
CHEF
Benvenido bela señorina y joven apuesto. Mesa para due persone, ¿cherto?
Ambos asienten con la cabeza. El chef los conduce a través de otras mesas hasta una esquina. Los sienta cerca de una pared donde cuelgan un par de fotos mal recortadas de italianos famosos.
CHEF
Puedo ofrecherles unos espaguetis a la boloñesa con fruto di mare. Buenisimo
MANUELA
(tuerce el gesto)
¿Espaguetis?
Manuela se gira. El chef le hace un gesto de duda al muchacho cuando Manuela no le mira. El joven mira a Manuela
JOVEN
Pero en Roma, ¿como no vamos a comer espaguetis?
MANUELA
Hay es verdad, tienes razón, para una vez que salimos de casa.
CHEF
¿Due platos?
AMBOS
Sí.
El chef se gira y sale para la cocina.
MANUELA
Que bonito que es todo, parezco la protagonista de una película de las que veía yo cuando era más joven.
JOVEN
Pero si usted sigue siendo muy joven.
MANUELA
Ojalá fuera cierto eso… pero bueno no nos vamos a poner tristes, que encima de que me llevas de viaje no voy a estropearlo.
El joven sonríe ante el comentario de Manuela.
JOVEN
Usted no estropea nada.
MANUELA
Pero que atento que eres, poco contenta se va a quedar la que de contigo…
El joven se sonroja.
El chef se acerca a la mesa con dos platos de espaguetis que deja sobre la mesa.
CHEF
Aquí tienen. Bon apetit.
SEC 6 EXT/DIA PLAZA.
La luz del día empieza a desaparecer poco a poco, en la plaza la gente camina alrededor de una pequeña fuente que se encuentra en el centro. Manuela y el joven entran en la plaza dando un paseo cogidos del brazo.
JOVEN
Manuela deberíamos irnos ya mismo, que todavía tenemos que coger otra vez un avión y tenemos que llegar a casa para la cena.
MANUELA
Ay, sí niño, es verdad, pero es que se me ha pasado el tiempo muy rápido.
Manuela mira la fuente. Se suelta del brazo del joven y se acerca. El le sigue a la fuente.
MANUELA
Eso si, antes de irnos tenemos que pedir un deseo en la fuente. Es una tradición.
JOVEN
(sonriendo)
Vale
Manuela se acerca a la fuente, saca una moneda para echarla a la fuente. Un golpe de aire le quita el pañuelo a Manuela, este cae al agua.
MANUELA
El pañuelo. Para un recuerdo que tenía de este viaje.
JOVEN
No pasa nada.
EL joven se mete en la fuente coge el pañuelo, se dispone a salir de la fuente, cuando e resbala empieza a deslizarse y acaba cayéndose en la fuente. Manuela empieza a reírse y se mete poco a poco en la fuente. El joven se levanta empapado.
La gente que pasea por la plaza los mira extrañados.
JOVEN
Pero Manuela ¿que hace? Que se va a resfriar…
MANUELA
(entre risas)
La dolce vita. No podía dejar pasar una oportunidad así.
JOVEN
(sonriendo)
Vamos para fuera anda, antes de que los dos nos resfriemos.
Manuela sale de la fuente y le da la mano para ayudarle a salir. Él le da el pañuelo a ella, esta lo estruja para secarlo y lo guarda en el bolso. Manuela se coge del brazo de el y salen de la plaza.
JOVEN
Bueno Manuela ahora si que nos vamos que tenemos que coger el avión
MANUELA
Si (seria)
JOVEN
¿Se lo ha pasado usted bien?, espero que le haya gustado, Roma es una ciudad muy bonita para pasear..
Sigue caminando y deja a Manuela parada atrás, se gira al no verla a su lado y la observa mirando al suelo con la mirada perdida)
JOVEN
¿Manuela le pasa algo? ¿Está bien?
Manuela no contesta y despacio levanta la mirada hacia él. poco a poco cambia el gesto hasta ponerse nerviosa.
El joven le pasa el brazo por el hombre y empiezan a caminar.
JOVEN
Venga Manuela vamos para la casa.
SEC 7 INT/NOCHE HABITACIÓN DE MANUELA
EL joven espera sentado en una silla enfrente de la cama. Manuela entra en la habitación preparada para irse a dormir. El joven se levanta, Manuela se acerca a la cama, se sienta.
JOVEN
Bueno Manuela, yo me voy ya, descanse ¿vale? Que hoy a sido un día muy movido.
MANUELA
Y que lo digas, pero ha merecido la pena. Muchas gracias hijo.
JOVEN
De nada Manuela… yo encantado de llevarla de viaje.
El joven se acerca a Manuela le da un beso en la mejilla.
MUCHACHO
Mañana vengo, ¿vale?
Manuela afirma con la cabeza. El joven sale de la habitación.
SEC 8 INT/NOCHE RECIBIDOR DE CLINICA
EL joven con una bandolera colgada al hombro recorre el pasillo hasta la puerta de salida del edificio. Se detiene en el mostrador de la entrada con una enfermera.
ENFERMERA
¿Tu no terminabas hoy al medio día?
JOVEN
Sí, pero bueno he estado dando una vuelta con Manuela.
ENFERMERA
Ya ha tenido que ser una vuelta larga
JOVEN
Sí pero bueno, no me importa.
ENFERMERA
¿Y mañana tienes también turno?
JOVEN
No, pero me acercaré un rato.
ENFERMERA
Ale, a descansar entonces.
JOVEN
Gracias…
El joven abre la puerta. Gira la cabeza hacía la enfermera.
JOVEN
Hasta mañana.
ENFERMERA
Hasta mañana.
EL joven sale por la puerta.
SEC 9. EXT/NOCHE CALLE PRINCIPAL
El joven sale de la clínica y se dispone a caminar por la misma calle donde le había dejado el taxi a él y a Manuela.
* Ganador categoría Guión en el Certamen (Externo) ”Picapedreros” de Poesía, Guión y Microrrelato 2012.