Escrito por: Climent G. O.

¡ Mirad la luna !…

Contempla con luminosidad el traspaso de las almas deshechas.

Cuerpos incansables que buscando el pan,

sólo encontraron la sal.

Noche de espanto…

Sombras y tinieblas,

no les dejan respirar.

Incluso la mar,

temblorosa, se ha ido.

No les falta nada,

ni la arena es ya, la esperanza buscada.

La espuma de las olas

es su última caricia.

Y así,

se deshace la esperanza vencida.

El corazón,

bajo la piel de ébano,

martirizada,

se para,

vacío de la rojez de la sangre que ya no late.

No hay lágrimas

en su rostro,

tan sólo el blanco

de unos ojos cristalinos

que no han perdido

la luz de una ilusión

que les mece el corazón

al quererse fundir

con el agua y la arena,

para dejar el marfil

de sus huesos martirizados

y pasar a ser

concha de esa playa.

Aquella que a pesar

de ser su verdugo

siempre será

el camino de esperanza

para unos hijos

que con todo perdido,

juegan a marionetas, buscando un cuento

donde a veces

las hadas hacen posible encontrar las estrellas

en una noche despejada, para que un pie truncado pueda por fin, descansar…

 * 1º Premio categoría Poesía en el Certamen ”Picapedreros” de Poesía, Guión y Microrrelato 2013 para centros penitenciarios