Tabla Periódica y Superelementos (4): En busca de los superelementos

Una línea de investigación de superelementos ha sido los meteoritos. Todo indicaba que el responsable de la anómala composición de Xenón del meteorito Renezzo fuera un superelemento ya extinguido con número atómico comprendido entre 111 y 116. También pueden existir vestigios en las nubes de gas resultante de la explosión de supernovas. Investigadores de laboratorios muy especializados optaron por orientar la búsqueda en ciertos materiales de la corteza y en los fondos marinos, aunque la concentración de superelemento y los costes del tratamiento de extracción hacían el proyecto de muy dudosa rentabilidad.

En ocasiones  han surgido problemas con los nombres de los elementos. En el caso del W se dio como válido el nombre de Wolframio, pero en 2005 la IUPAC lo cambió definitivamente por Tungsteno, pero conservando el símbolo W,  pese a la oposición de una parte del mundo hispano. Durante la guerra fría el binomio Ku- Ha, alusivo a los investigadores ligados a explosiones nucleares Igor V.Kurchatov Otto Hahn, generó controversia y nombres y símbolos se  sustituyeron respectivamente por Rutherfordio (Rf) y Dubnio (Db). La IUPAC tuvo durante un tiempo dificultades con los nombres, que llevaron a un sistema complejo, consistente en  símbolos de tres letras a partir de los dígitos de sus números atómicos expresados mediante una mezcla de raíces griegas y latinas. Así el 112, hoy Copernicum, era Uub, Ununbium.

6-Dubna-Moscow

Dubna-Moscow

Según escribe Theodore Gray:”Los elementos del 101 al 109 no tienen ninguna aplicación pero al menos puede crearse una cantidad visible y puede hacerse una lista con el número exacto de átomos que se han creado y cuándo se crearon. (…). Los núcleos de esta parte de la tabla periódica se vuelven demasiado grandes y difíciles de manejar para permanecer estables más de unas cuantas horas. El que más dura es el Mendelevio, con una vida media de 74 días y el de vida media más corta  el Meitnerio, solo 13 minutos”.

El aragonés Pascual Román planteaba estos retos científicos  hace unos años: “¿Cuál es el futuro que nos depara el nuevo siglo? ¿Qué nuevas aplicaciones tendrán los elementos superpesados? ¿Resistirá la ley periódica a los nuevos descubrimientos?” Algunas de esas cuestiones siguen pendientes y otras se van aclarando. Las investigaciones en Berkeley, Dubna, Darmstadt y los nuevos centros- Instituto Paul Scherrer de Suiza y el de Física y Química japonés-seguirán proporcionando respuestas.

Los motivos de las denominaciones concretas de los elementos presentan razones históricas diversas. Son muchos los que honran con su apellido a  científicos universales o que han investigado en su descubrimiento. Pero también se ha tenido en cuenta la mitología, especialmente la grecorromana. Daniel Torregrosa recoge minuciosamente en su libro Del mito al laboratorio hasta veinte elementos en que se da esta circunstancia.

En 2016 se dio nombre a cuatro elementos, el Nihonio (Nh-113), el Moscovio (Mc-115), el Téneso (Ts-117) y el Oganesón (Og-118). Este último hace honor al investigador ruso Yuri Oganessian, segundo científico que ve su nombre reflejado en la tabla en vida por haber experimentado sobre la isla de estabilidad.

Respecto al descubrimiento por españoles de algunos elementos, como el Platino, el Vanadio y el nombrado W, atribuidos por hispanos respectivamente a los minerálogos Antonio de Ulloa, Andrés Manuel del Río y los hermanos Juan José y Fausto de Elhuyar, siempre ha suscitado polémica con la IUPAC.

Pilar González-Duarte, catedrática de Química Inorgánica de la Universidad de Barcelona (UAB), que presidió  la Societat Catalana de Química, fue pionera en  la actualización de la Tabla Periódica y en su divulgación. Recorrió varias localidades aragonesas explicando a los preuniversitarios de Ciencia Viva las ventajas del conocimiento del Sistema Periódico. Cada año nos sorprendía con  versiones diferentes y genuinas de la Tabla y donaba ejemplares para los departamentos de los institutos.

El catedrático de Ingeniería Química de la Universidad de Barcelona Claudi Mans en su libro Tortilla quemada dedica el segundo capítulo- Los químicos tienen tablas- al Sistema periódico, con  humor y un original test, con  respuestas incluidas. Y otro catedrático de la UAB y estudioso de las relaciones Química- Música,  Santiago Álvarez .habla de obras musicales relacionadas con el tema que nos ocupa y cita Los elementos de Jean- Fery- Rebel.

Con unos versos del libro Las escrituras del universo (Poemas sobre ciencia) del físico David Jou concluimos.

Miradlos: aquí, los ladrillos del mundo, alineados en // pisos, en estantes, repitiendo regularmente propiedades, // delatando una estructura más profunda, // ya no materia eterna e inmutable, sino historia en las // estrellas, rastros de tanteos, edificios de niveles y // subniveles, nubes de incertidumbre, flores combinatorias.

Imprimir artículo Imprimir artículo

Comparte este artículo

Deja un comentario

Por favor ten presente que: los comentarios son revisados previamente a su publicación, y esta tarea puede llevar algo de retraso. No hay necesidad de que envíes tu comentario de nuevo.