Escrito por: Andrés F. S.

Cuando la policía detuvo a Hacking, empezó su calvario. Fue condenado a 8 años.

Aquello fue terrible y únicamente le salvo el gimnasio de la prisión, el Boxeo. “Me ayudaron a hacerme respetar a pesar de ser un tipo ni muy alto ni muy corpulento.

“Aquellos tíos eran autenticas bestias” muy capaces de acabar conmigo, entonces decidí  entrenar yo veía que lo necesitaba y ponían ganas les hable con el corazón: todos llevamos dentro un luchador, pero debéis utilizar este deporte como una válvula de escape para no meternos en líos otra vez por culpa de la violencia.

El sudor obro milagros, muchas peleas empiezan por inseguridad, el que tiene confianza en sí mismo no tiene nada que demostrar.

A pesar de las críticas de los encargados de la prisión las agresiones disminuyeron. Hacking antes de salir de prisión hizo un pacto con sus discípulos; si un viejo como yo puede salir de la cárcel y triunfar, vosotros también podéis hacerlo.Y está cumpliendo con su palabra ya ha hecho 10 combates y es campeón de Europa y no parara hasta ser campeón del mundo.

La clave está en la fortaleza mental y aprovechar la condena para algo positivo. Unos con el deporte, otros estudiando, pero hay que trazar una meta y el encierro puede ser tu aliado o tu esclavo, tú decides.

* 1º Premio categoría Microrrelato en el Certamen ”Picapedreros” de Poesía, Guión y Microrrelato 2017 para centros penitenciarios