¡Gracias!

Escrito por: Yolanda

Hay muchas manos ayudando en la cárcel. Funcionarios que hacen algo más que cumplir estrictamente su trabajo. Un enjambre de voluntarios cada vez más implicados. Desconocidos que escriben cartas a presos que no conocen. Donantes de cosas que necesitamos y no podemos comprar…pero esta carta, que no podría escribir sin mencionarlos, no es para ellos.

Esta carta es para los presos, todos los presos de Nanclares que prestan voluntariamente su ayuda, lo que tienen, lo que saben, su tiempo, sus ideas y su apoyo a un objetivo común: mejorar el entorno en que vivimos todos. Hemos ampliado la biblioteca (como siempre a base de donativos) y vosotros, pacientemente, habéis catalogado libros, restaurándolos, habéis hecho una gran labor de difusión entre vuestros compañeros.

Habéis ayudado a estudiar a los compañeros, casi sin libros, algunos han prestado los suyos. Habéis dado clases con vuestros medios propios, con apuntes que habéis sacado de vuestros estudios. Habéis colocado y puesto en marcha los ordenadores que (por supuesto donados) nunca hubieran llegado a las aulas porque nosotros no podemos estar a todo. Gracias a los que cuidan a un compañero, a los que cuidan a los perros y a los que escriben en la revista.

A parte de la importancia material y el beneficio directo de lo que hacéis, algo de humanidad, de esperanza … se queda flotando en el aire. La cárcel ya no parece tan terrible. Estoy contenta de trabajar con vosotros. Me hacéis sonreír casi todos los días. GRACIAS por transformar nuestro entorno, por dar lo mejor de vosotros, por compartir, por esperar… Sin vosotros nada de esto sería lo mismo.

Imprimir artículo Imprimir artículo

Comparte este artículo

Deja un comentario

Por favor ten presente que: los comentarios son revisados previamente a su publicación, y esta tarea puede llevar algo de retraso. No hay necesidad de que envíes tu comentario de nuevo.