La justa injusticia
Escrito por: Fidel M. G.
Camina entre hierro y hormigón,
con el alma en carne viva;
le arrebatan su ilusión,
que es ahora su legado.
La pena en él se ha instalado,
pues no importa lo que diga,
amargura y confusión,
siente al estar condenado.
No expliques más tus fatigas,
ni cómo te han degradado
con la fuerza desmedida
del que humilla al jubilado.
Tú no mereciste esto
pues tus peores pecados
han sido los más honestos
en este mundo malvado.
¿Cuál ha sido la mentira?
Las leyes que han aplicado
ciertas gentes que castigan
la inocencia de un enfado.